Y entre mi y fa me encuentro yo perdida y sin voz
Vuelvo la mirada te encuentro en mi alma
Y me preguntas ¿Por qué tanto dolor?
¿Por qué la conmoción?
Y yo que con melodía triste y apagada te canto mi dolor
No hago más que dar esta inútil sentencia de infinita pena y sufrimiento,
me atraviesas con la mirada, cruzamos el camino que nos lleva a un puerto lejano y sombrío.
Cuanto tiempo ha pasado y aun así sigo encontrándote en mis latidos y en mi respirar
Te encuentro en mi infinita alegría y vuelvo a caminar el sendero de un fa que antes perdido se vuelve a recobrar y llega la melodía dulce de tu vos, de la mía, de la nuestra.
¿Y es que acaso que ha sucedido? ¿No ha sido más que un sueño perdido?
Pero como poder volver a el, si ni si quiera encuentro la clave, esa clave de misterio de tristeza, de dolor, de miseria, de profunda soledad y también de alegría, de lindos acordes que me hacen sonreír cuando recuerdo en tu mirada ese brillo infernal que me dice ten cuidado pero vuélvelo a intentar, y es que ya no veo ya no siento y ya no se, ahora solo escucho y oigo y oigo y escucho lo que poco he de oír y escuchar, y luego vuelvo y siento y veo que ya no estas aquí pero igual mi alma vuela junto a ti, con un suave canto venido desde allí que no para de retumbar en mi cabeza y me lleva hasta donde dos almas perdidas vuelven a cruzar y se juntan de la mano, para volar a lo lejos, lejos, lejos y más lejos de este ruido insoportable que trae a los transeúntes de un lado para el otro sin tener la mas remota idea de que en cada sonido una parte del alma queda atrapada y otra vuelve a renacer y ahora yo renazco en este riachuelo llano, perezoso y dormido en donde universo entero ha conspirado contra el mundo para darme una orquesta sinfónica en la que solo nosotros somos los invitados y que a la vez somos parte de ella, y de un mundo infinito de alegría, ahora, ahora piérdete y vete de mi lado ya que como toda buena ilusión me dejaras solo soñando y jamás te darás cuenta de lo mucho que te amo.
Y has de irte lejos de mi fantasía para volver a esta linda y a la vez tediosa rutina, y torpe también, en la que me desconcentras de mi sueño y me invitas a descender de una manera tan hermosa como insoportable a la vez.
¿Que te pasa niña buena? ¿Que te sucede? te noto triste y distraída, ¿En que piensas esta vez?
Y yo miro suplicante queriendo gritarte la verdad, pero agacho la mirada y de nuevo con esfuerzo intento fingir que nada pasa, que no siento nada, que no creo nada, y no busco nada para luego un momento más tarde inconscientemente volver a volar lejos de esta tan aburrido mundo, en el que me encuentro sola sin ti, pero en el que te llevo aunque ni siquiera sepas que estas allí.
Vuelvo la mirada te encuentro en mi alma
Y me preguntas ¿Por qué tanto dolor?
¿Por qué la conmoción?
Y yo que con melodía triste y apagada te canto mi dolor
No hago más que dar esta inútil sentencia de infinita pena y sufrimiento,
me atraviesas con la mirada, cruzamos el camino que nos lleva a un puerto lejano y sombrío.
Cuanto tiempo ha pasado y aun así sigo encontrándote en mis latidos y en mi respirar
Te encuentro en mi infinita alegría y vuelvo a caminar el sendero de un fa que antes perdido se vuelve a recobrar y llega la melodía dulce de tu vos, de la mía, de la nuestra.
¿Y es que acaso que ha sucedido? ¿No ha sido más que un sueño perdido?
Pero como poder volver a el, si ni si quiera encuentro la clave, esa clave de misterio de tristeza, de dolor, de miseria, de profunda soledad y también de alegría, de lindos acordes que me hacen sonreír cuando recuerdo en tu mirada ese brillo infernal que me dice ten cuidado pero vuélvelo a intentar, y es que ya no veo ya no siento y ya no se, ahora solo escucho y oigo y oigo y escucho lo que poco he de oír y escuchar, y luego vuelvo y siento y veo que ya no estas aquí pero igual mi alma vuela junto a ti, con un suave canto venido desde allí que no para de retumbar en mi cabeza y me lleva hasta donde dos almas perdidas vuelven a cruzar y se juntan de la mano, para volar a lo lejos, lejos, lejos y más lejos de este ruido insoportable que trae a los transeúntes de un lado para el otro sin tener la mas remota idea de que en cada sonido una parte del alma queda atrapada y otra vuelve a renacer y ahora yo renazco en este riachuelo llano, perezoso y dormido en donde universo entero ha conspirado contra el mundo para darme una orquesta sinfónica en la que solo nosotros somos los invitados y que a la vez somos parte de ella, y de un mundo infinito de alegría, ahora, ahora piérdete y vete de mi lado ya que como toda buena ilusión me dejaras solo soñando y jamás te darás cuenta de lo mucho que te amo.
Y has de irte lejos de mi fantasía para volver a esta linda y a la vez tediosa rutina, y torpe también, en la que me desconcentras de mi sueño y me invitas a descender de una manera tan hermosa como insoportable a la vez.
¿Que te pasa niña buena? ¿Que te sucede? te noto triste y distraída, ¿En que piensas esta vez?
Y yo miro suplicante queriendo gritarte la verdad, pero agacho la mirada y de nuevo con esfuerzo intento fingir que nada pasa, que no siento nada, que no creo nada, y no busco nada para luego un momento más tarde inconscientemente volver a volar lejos de esta tan aburrido mundo, en el que me encuentro sola sin ti, pero en el que te llevo aunque ni siquiera sepas que estas allí.
Ida Isab
