Y de la nada una sombra opacó su sonrisa
Busco la luz para que pudiera volver a relucir
pero entonces un dolor profundo la emargo
vió como una de las tres flores a las que amaba se convertia en horrible malesa
La amargura llegó de un momento a otro a su alma, al igual que llega la lluvia en un día soleado
esta susodicha malesa, se apoderó de aquello que la princesa queria mucho
le dolió tanto tanto que sus bellos ojos decidieron bajar la mirada para no tener que seguir viendo eso que tanta pena le causaba intento sonreir de nuevo, pero sus labios disfrazados de fresa
bajaron ese dulce arco que lograba en todos una encantadora armonía, para transformarse ahora en una sombría expresión.
Ha decidido dejar ir esa putrefacta flor y seguir adelante, ahora su sonrisa perdida intenta hallar el camino, ve la esperanza en aquello que sigue siendo bello, en aquello que seguira siendo parte de ella, se desprende del odio y contempla con dulce alegría, ese nuevo amaneces la luz a vuelto a su rostro y ahora intenta olvidar lo mucho quizo a esa mala flor, y aguarda con las otras a que una bella mañana llegue aquel principe que le robe la sonrisa y se la devuelva con otra y que con el idoma de los ojos pueda hacer que esta permanezca una eternidad mientras su alma y corazon dancen un nuevo son que llene de alegría más allá de la razón.
Busco la luz para que pudiera volver a relucir
pero entonces un dolor profundo la emargo
vió como una de las tres flores a las que amaba se convertia en horrible malesa
La amargura llegó de un momento a otro a su alma, al igual que llega la lluvia en un día soleado
esta susodicha malesa, se apoderó de aquello que la princesa queria mucho
le dolió tanto tanto que sus bellos ojos decidieron bajar la mirada para no tener que seguir viendo eso que tanta pena le causaba intento sonreir de nuevo, pero sus labios disfrazados de fresa
bajaron ese dulce arco que lograba en todos una encantadora armonía, para transformarse ahora en una sombría expresión.
Ha decidido dejar ir esa putrefacta flor y seguir adelante, ahora su sonrisa perdida intenta hallar el camino, ve la esperanza en aquello que sigue siendo bello, en aquello que seguira siendo parte de ella, se desprende del odio y contempla con dulce alegría, ese nuevo amaneces la luz a vuelto a su rostro y ahora intenta olvidar lo mucho quizo a esa mala flor, y aguarda con las otras a que una bella mañana llegue aquel principe que le robe la sonrisa y se la devuelva con otra y que con el idoma de los ojos pueda hacer que esta permanezca una eternidad mientras su alma y corazon dancen un nuevo son que llene de alegría más allá de la razón.
Ida Isab
